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El ser humano se realiza gracias a la permanente relación con sus pares, con el contexto y sus valores. En la relación se vive con otros y las expresiones se entienden a partir del ambiente donde se desarrollan; esta relación suministra información, inicia y mantiene un proceso comunicacional. Barrera (1999) sostiene que la comunicación "ocurre en toda acción humana…requiere de un acto humano recíproco"… "es la manifestación de las posibilidades y de las potencialidades de las personas en el plano de las relaciones" p.74. En tal sentido, en la comunicación se precisan los siguientes aspectos:
Quién (interpreta, dice, percibe…)
Qué (evento)
Con quién (alteridad y relaciones)
Para quién (relaciones)
Acerca de (contenido)
Por quién (motivos, justificación)
Por qué (motivos, justificación)
Para qué (objetivos, propósitos)
Cuándo (tiempos, etapas)
Dónde (sitios, lugares)
Cómo (proceso, metodología)
Cuánto (duración, intensidad)
Con qué (recursos)
Efectos (repercusiones)
Intenciones (deliberaciones)
Condiciones (características)
Contexto (holos – cada parte tiene el todo)
Códigos (semiosis)
Canalizar nuestros pensamientos, acciones y sentimientos es una danza; en donde nos acompasamos, calibramos y reencuadramos para optimizar el proceso comunicacional, así permitimos relaciones asertivas con grupos primarios y secundarios. Como producto de ese encuentro poderoso trabajamos mejor y somos capaces de resolver conflictos, cultivándonos desde una visión compartida que permita el logro de objetivos.
